domingo, 19 de febrero de 2012

La perfección complementaria

Hoy me he levantado con ganas de escribir cosas bonitas.
 Lo cierto es que no nos damos cuenta de cómo una persona se vuelve indispensable en nuestra vida, simplemente un día te paras a pensar y sabes que no podrías vivir sin ella; que tu cordura y tu locura dependen de ella; que si tienes alegrías estará para celebrarlas contigo pero que si lloras será la primera en sacarte una sonrisa y levantarte el ánimo; que te obliga a centrarte en los estudios pero luego es la primera que te incita a chupitos una y otra vez; con la que puedes hacer cualquier cosa teniendo siempre un "si" por respuesta; con la que puedes contar incondicionalmente.
Podéis llamarle Jasmine, Atenea, Da gusto sonreír o como os de la gana. Eso no cambiará absolutamente nada de lo perfecta que es dentro de sus imperfecciones y, después de todo, eso es lo que todos buscamos. La perfección complementaria. Yo por suerte, una vez más, la he encontrado y tan sólo a un par de casas de la mía :)

miércoles, 15 de febrero de 2012

Y qué mal lo hicimos...

Qué perfecta que era la situación. Cuántas oportunidades tuvimos. Qué felicidad se palpaba en el ambiente. Cuántos sentimientos contenidos. Qué complicidad con una sola mirada. Cuánto miedo oculto. Qué gran secreto a voces. Cuánto llegamos a querer... y qué mal lo hicimos.

lunes, 6 de febrero de 2012

Las secuelas del accidente con el ferrari

Escribo esto para desahogarme y sacar todos los pensamientos que tengo ahora mismo en mi cabeza. Ya no sólo como docente, sino como persona, he defendido la importancia de la etapa infantil en el desarrollo de la persona, pero más aún en cuanto al tema de la "inocencia".

Hoy, un amigo me ha confesado que con 7 años se metía en la cama con su amiga (otra niña de su misma edad) y ya tenían tocamientos sexuales. Al enterarme he sentido mil emociones a la vez: sorpresa, escándalo, impotencia, tristeza... y acto seguido me ha llevado a plantearme ¿cuándo comienza la verdadera sexualidad de una persona?

La infancia es una de las etapas más bonitas que una persona puede vivir. El sentimiento de inocencia, el no conocer lo que es el sexo. Que tus amigos sean simplemente eso, amigos, sin dobles intenciones, niños con los que jugar, reír y poder abrazar sin que nadie malpiense. Poder decir "te quiero" a quien quieras y cuando quieras sin consecuencias. Sin problemas.

Que tu mayor pensamiento "sexual" sea "me gusta X", le pediré que sea mi novio; y que eso (con un poco de suerte) consista en ir cogidos de la mano o dar algún beso rápido y vergonzoso.

Todos somos seres sexuales, y la sexualidad no es algo que aparezca de la noche a la mañana, nos acompaña desde que nacemos, pero necesita un periodo de maduración realmente importante antes de poder ser considerada como "acto sexual". Si adelantamos ese acto antes de que la maduración y crecimiento (físico y psíquico) haya tenido lugar, nos encontraremos con unas personas llenas de carencias en muchos ámbitos personales; precisamente, por culpa de esa inexistente evolución personal.

Como quien no visto jamás un coche y, un día, se pone a conducir un ferrari. 
El accidente está asegurado. 
Y las secuelas de éste acompañarán al conductor novato durante el resto de su vida.

Aquello que anhelan

-Dos tíos solos por la tarde viendo Doctor Zhivago. Estamos muy mal, te lo digo yo...
-¡Lo tiene todo! El anhelo, el sufrimiento, una mujer por la que desafiar tormentas y cruzar continentes, un amor tan grande que incluso muerto siga desgarrándome el alma... Eso quiero.
-Tienes que salir, en serio, relacionarte con gente real.
-¿Quieres verla otra vez?


"...Y que le gusten los perros"



Fácil decirlo mientras estás tirado en el sofá. La gente sólo se queja, se lamenta de si misma y de sus problemas, ven lo negativo de la vida y olvidan lo realmente bueno, aquello que merece la pena.
No se dan cuenta que es precisamente esa actitud la que espanta aquello que anhelan.

viernes, 3 de febrero de 2012

Excesivamente lejos de la realidad.

Me acabo de dar cuenta del dramatismo puro y duro del que está impregnado mi blog. Cualquiera que lo leyera sin conocerme pensaría que vivo cada día al punto del suicidio, pero esa imagen queda excesivamente lejos de la realidad.
Esto tan sólo es un escape para las ralladas momentáneas que me impiden continuar con mi felicidad. Algunos escriben canciones, otros un blog, otros se lo callan todo... Cuanto menos os traguéis y más pongáis en orden en vuestra cabeza más felices podréis ser en el día a día.
Y sobretodo, no dejéis nunca de sonreír. Puede parecer el consejo más típico del mundo, pero con sólo una sonrisa podéis alegrar muchas vidas sin daros cuenta.

miércoles, 25 de enero de 2012

Horrible

Horrible. Es absolutamente horrible extrañar a alguien. 
Lo peor es extrañar a alguien cuando parece que la otra persona no te extraña a ti; y sin embargo, echas de menos las charlas nocturnas de cada día, los piques musicales, los consejos, las burradas, las borderías mutuas, las llamadas y mensajes, los encuentros de fiesta, los conciertos juntos entrándonos gratis...
No ha pasado un puñetero día en el que no haya intentado escribirle pero creo que por primera vez en mi vida, simplemente, no sé qué decir, no sé qué intentar, no sé ni si merece la pena o será sólo hacer el gilipollas y ¿por qué? Porque no puedo pensar otra cosa que en decirle "te echo demasiado de menos".

martes, 10 de enero de 2012

Mi propia tranquilidad y felicidad.

Mi propósito de éste año: buscar mi propia tranquilidad.
Pero después de muchas reflexiones he llegado a la conclusión de que, para poder llegar a ella, antes debo aclarar los asuntos que dejé pendientes en el pasado.
Hablar con cada una de las personas con las que no me siento bien por X sucesos ocurridos. Salir menos, pero disfrutar al máximo siempre que lo haga. Estudiar más y con más tiempo (la biblioteca me reclama). Sacarme los títulos que me he propuesto. Demostrar a la gente que quiero cuanto la necesito. Viajar fuera de España, ir a festivales de música.
En fin... un mil y un propósitos que (nadie cumple) y que sin embargo a día 10 estoy cumpliendo y así seguiré. Objetivo: totalmente egoísta, mi propia tranquilidad y felicidad.

viernes, 6 de enero de 2012

Una roca.

Una roca. Una roca indestructible, dura, irrompible. Una roca sin sentimientos. Una roca que no se tambalea ante nada. Una roca firme. Pero después de todo, una roca falsa, hueca, rellena de aire o, lo que es peor, rellena de mierda.